Cuidados y mantenimiento de un sofá de piel

Los sofás de piel necesitan cierto mantenimiento y limpieza de vez en cuando. El cuero es uno de los materiales más solicitados por su elegancia y distinción. Además, la piel es un material muy resistente, puede durar muchos años y seguir teniendo apariencia de estar como nuevo.

¿Sabes cómo limpiar un sofá de piel correctamente?

Sigue estos estos sencillos consejos acerca del cuidado de la tapicería de piel y conseguirás que tu sofá luzca igual de limpio y lustroso que el primer día.

Para la limpieza diaria bastará con humedecer un paño suave de algodón o microfibras con un poco de agua. Eso debería ser suficiente para que tu sofá permanezca limpio cada día.

En casos de manchas algo más difíciles, lo mejor es usar una mezcla de agua tibia con jabón de glicerina o PH neutro para proteger la elasticidad y el brillo de la piel de tu sofá.

Si la mancha es especialmente resistente, existen infinidad de productos para la limpieza de éstas. Busca productos de limpieza de buena calidad y siempre antes de comenzar a limpiar conviene hacer una prueba en una parte no visible del sofá.

Ten especial atención en la zona de las costuras, ya que éstas tienden a ensuciarse y, con el tiempo, pueden hacer que tu sofá parezca sucio aunque no lo esté.

Por último y muy importante, hidrátalo de vez en cuando, el cuero tiende a endurecerse, obtiene cierta rigidez y es más fácil que se agriete, sobre todo cuando no se usa mucho. Para esto puedes usar cremas específicas para piel, también podemos aplicar un poco de crema hidratante con un paño suave.